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Hasta el año 1808 el paso de la Sagrada Entrada en Jerusalén de la hermandad del Amor disponía de unas murallas. En éste mismo años fueron sustituídas por unos arcos que hacían las veces de la puerta de entrada de la ciudad de Jerusalén. El famoso libro de José Bermejo Carballo, Glorias Religiosas de Sevilla, fue reeditado en 1977 por la hermandad de Jesús Despojado con el fin de conseguir dinero para poder sacar a flote la reorganización de la hermandad. Hacia finales de la década de los 30 del siglo XX la hermandad de la Paz quiso obtener el Nazareno El Cristo de la Humildad y Paciencia es una imagen de pasta realizada en el siglo XVI desconociéndose el autor. Precísamente el 12 de septiembre del año 1800 salió en procesión de rogativas con sus cofrades vistiendo la túnica nazarena. En el año 1883 la hermandad de la Hiniesta salió en el último lugar de la madrugada acompañada de una compañía de soldados romanos. En el año 1909 la hermandad de San Roque "estrenó" nuevas andas para el Nazareno de las Penas. Mil pesetas fue el costo de la adquisición a la hermandad de Pasión de dicho paso. Durante los años 1897 y 1898 la Virgen de la Estrella procesionó sin palio por encontrarse el suyo en un estado de conservación realmente precario. En la Semana Santa del año 1937 Nuestro Padre Jesús del Silencio de la hermandad de la Amargura salió sobre el paso cedido del Cristo de la Salud de San Bernardo. La Virgen de la Amargura, que también había sufrido la pérdida de sus enseres pudo salir gracias al rápido y audaz trabajo de Cayetano González. En el año 1911 la hermandad de la Amargura tomó la decisión de diferenciar los nazarenos de la comitiva del Señor y de la Virgen. Según el acuerdo al que llegaron, los nazarenos vestirían todos túnicas blancas de cola pero los que acompañaran el Señor lo harían con cíngulo morado y los de la Virgen con cíngulo amarillo.
La hermandad del Amor fue la primera cofradía que pudo añadir en sus títulos el de Pontificia. Dicha concesión fue realizada por S.S. León XII en febrero de 1824. Diez mil pesetas fue el precio a cobrar por Antonio Castillo Lastrucci por la talla de la Virgen del Rocío en el año 1955, año de su fundación en el templo de Santa María la blanca. Durante más de nueve horas pudo contemplarse al Señor Cautivo durante el Via Crucis Cuaresmal de las Hermandades y Cofradías que presidió en el año 1993. Como curiosidad, la comitiva se paró frente a la capilla Real de la Santa Iglesia Catedral para realizar una de las estaciones frente a la Virgen de los Reyes. La hermandad de Santa Marta quiso fijar su residencia en San Bartolomé allá por 1952 pero la estrechez de las calles del barrio y su anhelo de sacar a la calle un paso de grandes dimensiones, hizo que se trasladaran a San Andrés en noviembre del mismo año. Décadas más tarde, en 1989, la iglesia se cerraría al culto hasta el año 2001, quedando establecida la hermandad en la cercana iglesia de San Martín. En 1943 el imaginero gaditano José Luis Pires talló una imagen para la hermandad de San Gonzalo que podemos encontrar en Jerez de los Caballeros (Badajoz) y que procesiona bajo la advocación de Jesús del Gran Amor. En 1987 las mujeres pudieron hacer estación de penitencia a la Catedral con el hábito nazareno en la hermandad de la Vera+Cruz. Pese a que anteriormente lo habían realizado durante corto tiempo la hermandad de La Paz y de La Macarena, la serie continuada de Boletines Informativos en las hermandades la inició la hermandad de Las Penas en 1956. En 1902 el misterio de Las Aguas, desde San Jacinto, salió con una centuria romana trás él. En el año 1575 en el compás de San Andrés una asociación de fieles que pertencían al gremio de · Como hermandad de Gloria, la cofradía del Cerro fue fundada en 1955, rindiéndolo culto a una primitiva Virgen de los Dolores obra de Sebastián Santos Rojas. El Sábado Santo de 1956 una representación de la hermandad de Los Javieres participó en la comitiva procesional de la Soledad de San Lorenzo. Un año más tarde, la hermandad de Los Javieres iría por primera vez a la Santa Iglesia Catedral. La Hermandad de San Esteban fue de las pioneras en sacar una Banda de Cornetas y Tambores de la propia cofradía. Fue en el año 1979. En la Semana Santa de 1980 tocaron tras el Cristo de la Salud y Buen Viaje. En 1937 el militar José Millán Astray, fundador de la Legión Extranjera, fue nombrado Hermano de Honor de la hermandad de Los Estudiantes. Dos años más tarde procesionó dentro de la comitiva cofrade junto con la Banda de su misma Legión que a la altura de los palcos de la Plaza de San Francisco, interpretó la tan poco cofrade pieza "Novios de la Muerte". Como quiera que la Junta de Gobierno le indicó que no era la marcha más adecuada para una cofradía, el militar mostró su deseo de no figurar nunca jamás en la comitiva nazarena. No hay mal que por bien no venga.... La hermandad de San Benito tiene su lugar fundacional en Triana a mediados del siglo XVI. En 1845 fue por primera vez a la Catedral, residiendo aún en dicho barrio. Hasta entonces, como era norma, procesionaban a la Iglesia de Santa Ana. Desde 1957 la hermandad de la Candelaria está hermanada con el Cabildo Insular de Tenerife. Esto es debido a que en la isla canaria se rinde y se tiene fervor a la Virgen del mismo nombre. En recuerdo de dicho hermanamiento, la Candelaria recibe flores desde la isla de Tenerife. La hermandad del Dulce Nombre salió por primera en 1920 desde la Iglesia de San Román. Por entonces rendían culto a una taya del Señor elaborada por Ángel Rodríguez Magaña que actualmente podemos ver en la Iglesia de Santa María de las Flores del barrio de Pio XII. Quince años atrás que el Dulce Nombre inauguró el Martes Santo la herma Hasta 1978 la hermandad de la Sed prcesionaba por el barrio de Nervión el Viernes de Dolores. Sus hermanos lo hacían vistiendo el hábito negro con cíngulo blanco pero sin capirote, al uso de los penitentes. Un año después el único paso del Crucificado hacía Estación de Penitencia a la Catedral. En el año 1902 la Virgen del Refugio, de la hermandad de San Bernardo, salió acompañada por una talla de San Juan Evangelista. La cofradía del Buen Fin salió procesionalmente por primera vez en el año 1884. En aquella estación salió cun Cristo que era de papelón, junto a una Dolorosa y un San Juan Evangelista. Cuatro años más tarde la hermandad se traslada a la Parroquia de San Pedro y es allí dónde le dan culto a un crucificado con la advocación de Burgos uqe actualmente conocemos. Estos también fueron, con matices, los primeros pasos fundacionales de la hermandad del Cristo de Burgos. En 1979 se conmemoraba en la hermandad de la Sagrada Lanzada los cincuenta años de la talla del Cristo por Antonio Illanes. Para conmemorar dicha efeméride, la hermandad decidió realizar una procesión extraordinaria llevando al Cristo a la Iglesia del Santo Sepulcro y San Gregorio, lugar éste donde se celebró el quinario. El Cristo uba sobre el paso de la Virgen y con los candelabros del misterio. En 1985 lel grupo de la Piedad de la hermandad del Baratillo preisidó el Via Crucis de las cofradías de Sevilla. La Virgen de la Piedad iba vestida magistralmente de hebrea.
La imagen del Señor de la Divina Misericordia de la hermandad de las Siete Palabras fue titular de la extinta cofradía de Ánimas. Procesionó por primera vez en 1977 después de que, un año antes, el imaginero Luis Ortega Bru labrara nuevo cuerpo. En 1897, además de procesionar el misterio del Prendimiento y Nuestra Señora de Regla, la hermandad de Los Panaderos hizo estación de penitencia incluyendo un paso en el que figuraba la imagen de San Andrés. Desde el año 1848 las personas de raza blanca son admitidas como hermanas en la hermandad de Los Negritos. Hacia 1651 la hermandad de La Exaltación procesionaba con un paso alegórico que representaba el Triunfo de la Santa Cruz. Recurriendo al tema de los pasos que desaparecieron, hay que constar que la hermandad de Las Cigarreras, corriendo el año 1628 hacía su estación de penitencia con tres pasos: el de la Columna y Azotes; el de la Sagrada Púrpura -en el cual se representaba al Señor, en el suelo, buscando su túnica, y la Virgen de la Victoria bajo palio. La hermandad de Montesión es la única que no ha variado de sede desde sus orígenes fundacionales en 1574. Cuatro años más tarde Jerónimo Hernández esculpió el misterio de la Oración en el Huerto. Desde 1850 y hasta 1866 figuró en el paso de la Oración en el Huerto de la hermandad de Montesión un arco de piedra que simulaba la entrada al Huerto de Getsemaní. La hermandad de la Quinta Angustia que conocemos en la actualidad es fruto de la fusión de dos cofradías: la de las Angustias y la del Dulce Nombre de Jesús. Sus orígenes más remotos se situán en el año 1500. Las bambalinas del paso de palio de la Virgen del Valle y que procesionan en la actualidad proceden del siglo XVII. Son las más antiguas de cuantas se pueden ver durante la Semana Santa y fueron adquiridas en 1805 a la extinta cofradía de la Antigua.
En el año 1590 la hermandad del Silencio estrenó unos respiraderos de plata para las andas del paso de la Virgen. Cuatro años antes adaptaron el antifaz al armazón cónico creado por la Hiniesta y que hoy conocemos como capirote. En 1927 la hermandad del Gran Poder inauguró la primera casa hermandad de las cofradías sevillanas. Fue en la calle Hernán Cortés justo donde está actualmente. Existen indicios que indican que la primera salida procesional de los armaos de la macarena data de 1658, caminando tras el paso del Señor de la Sentencia. El primer paso de color oscuro que realizó estación de penitencia en la Semana Santa de Sevilla fue el de la hermandad del Calvario. Hacia 1418 se remontan los orígenes de la hermandad de la Esperanza de Triana. Parece que fue allí donde el gremio de ceramistas iniciaran el culto a la advocació de Nuestra Señora de la Esperanza. Más tarde, tras sucesivas fusiones, se erigió la cofradía que conocemos en la actualidad. La hermandad de Los Gitanos dispone de una talla de San Juan Eavngelista obra de José Vázquez Sánchez, que no procesiona, teniendo éste la particularidad de disponer entre sus manos del Libro de los Evangelios. La magnífica Cruz de Guía de caoba y plata de la hermandad de La Carretería, es obra anónima del año 1707. En 1862 la hermandad de La Carretería estrenó un paso alegórico que representaba el Triunfo La Virgen del Mayor Dolor en su Soledad de la hermandad de La Carretería obstenta el privilegio de ser la única que ha procesionado bajo palio en un Santo Entierro Magno. Fue en el año 1920 La hermandad de la Soledad de San Buenaventura lleva residiendo en el templo del mismo nombre desde 1851. Antes había estado en el convento de monjas de la Concepción y en San Juan de la Palma. En la tarde del Viernes Santo de 1898 cuando la cofradía del Cachorro transitaba por la calle Placentines, un movimiento brusco de la cuadrilla de costalero hizo que el paso se moviese de forma anómala y la mano del Cristo se enganchó en un balcón. La mano se rompió y hubo de ser restaurada con urgencia. La excepcional cruz que lleva el Nazareno de la O es obra de Manuel José Domínguez siguiendo el proyecto de Domingo Balbuena. La obra se realizó en 1731. Ya en 1819 en la comitiva procesional de la hermandad de San Isidoro figuraban hermanas. La talla del magnífico Cirineo que acompaña al Señor es obra de Francisco Antonio Gijón quien lo labró en 1668, año en el cual también talló el paso de misterio. La hermandad de Montserrat quedó agregada junto con la de Presentación y Santo Sudario a la Hiniesta en la reducción de cofradías de dicho año. Hasta prácticamente su traslado al ex-convento de la Paz, la hermandad de la Sagrada Mortaja gozaba de un espíritu procesional de auténtico barrio (Santa Marina): centurias romanas y hasta cuatro bandas llegaron a acompañar al misterio que cierra el Viernes Santo.
La cofradía de la Trinidad procesionaba anteriormente los Viernes Santos, pero a partir de la inclusión del Sábado Santo en 1956 adoptó ese día para realizar la estación de penitencia. En la procesión del Santo Entierro de 1693 se estrenó una nueva Urna de plata y carey para el Cristo Yacente al cual le rodeaban veinticuatro sacerdotes ceriferarios. El paso del Duelo, el cual contenía un baldaquino tallado, también fue estreno ese año.. La Soledad de San Lorenzo presidió el Via Crucis de las cofradías en el año 1988, dándose la circunstancia de que, hasta el momento, es la única Virgen que ha salido sin la compañía de su Hijo en éste acto cuaresmal. La hermandad lleva solicitando su inclusión en la nómina de las hermandades del Sábado Santo desde el año 1978. Por entonces en una reunión celebrada por los hermanos, representantes de las cofradías y Hermanos Mayores del Sábado Santo consideraron que la Resurrección no debería tener carácter penitencial y la hermandad de la Soledad de San Lorenzo se opuso a su salida el Sábado Santo. |
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